Los atlas surgieron como una colección de mapas, concebidos para representar un territorio determinado y
examinar uno o varios temas; han representado rasgos o caracteristicas particulares de la realidad geográfica por
milenios, incluso antes de que la Geografía fuera reconocida como una disciplina establecida. Indiscutiblemente,
los mapas juegan un papel fundamental en la práctica geográfica y son elementos comunes a la disciplina tanto en
su vertiente física como humana. La visualización cartográfica se ha visto beneficiada por los desaarrollos
computacionales como un medio para construir conocimiento acerca del mundo de una manera más rápida; se
puede buscar lo "no evidente" a través de grandes y complejas bases de datos elaborando figuras continuas a través
de la cartografía digital que ha vuelto el proceso mucho más ágil para la representación de la información geográfica.